Agradecer es reconocer los dones que se nos regalan cada día y reconocer el sentido que se encierra en cada atasco.
Sin agradecimiento se diluye el reconocimiento de lo que de verdad somos y nos quedamos estancados en el rezongo y la desdicha.
Cuando agradecemos somos capaces de descubrir nuestras dosis infinitas de dicha y bienestar.
Cuando la duda nos invade suele atacarnos una percepción de que nos falta, de que podría ser mejor, de que otros obtienen mejores resultados. Pero no somos capaces de mirar y apreciar los verdaderos resultados.
Yo agradezco a la Naturaleza que me rodea cada día, a cada planta medicinal, agradezco a mis hijos ser mis maestros, agradezco a todas las personas que me consultan porque confían en mí y me enseñan con su experiencia vital a ser más humana. Agradezco a mis guías ya que no sueltan mi mano y me invitan a conocer nuevos caminos.
Deseemos más agradecimiento en todo el mundo. Desparramemos agradecimiento. Demos las gracias a la vida, a la abundancia, a la salud, al alimento, a las sonrisas, a las palabras, a nuestro mundo de todos los días. Sea mucho o poco esto que agradezcamos es nuestra gracia, nuestro don que se nos otorga para ser más plenos cada vez.
Te invito a agradecer. Te invito a compartir lo que tengas para agradecer. Escribe en los comentarios con total confianza. Te doy las gracias de antemano por compartir parte de ti conmigo.