Luna Nueva de Acuario y Año nuevo del chancho de tierra.

Los vientos solares y los rayos cósmicos que estamos recibiendo en nuestro planeta-hogar Gaia,  ayudan a desarrollar un mayor desarrollo de unas condiciones energéticas afines con la Luna Nueva en Acuario.

Esta luna nueva es muy intensa y exige estar conectado con el propio ser, unificando los tres cuerpos físico-emocional y espiritual para hallar un equilibrio que se manifieste conectado con uno mismo.
Esta luna no va a traer nada desde fuera. Nuestras necesidades y la información que requerimos para cumplir nuestro viaje evolutivo va a llegar desde dentro de la conciencia cósmica.

Desde nuestro ser cósmico seremos capaces de evaluar nuestro camino: desde donde venimos y hacia donde nos es verdadero y positivo ir. Los regentes de Acuario se encuentran ambos en una relación muy activa con el enérgico e hiperactivo Marte. Urano lo espera en los últimos grados de Aries y Saturno despide la cuadratura.
Nos vemos llamados a actuar pese a todo, a romper la rigidez del control imposible de las circunstancias antes de que el control nos rompa.

Esta luna nueva es una invitación a soltar toda intención de predecir hacia donde vamos. Y afianzar la intención de cuidar nuestras heridas y las de nuestro hogar.


Ya que las lunas nuevas son momentos para intencionar, podemos tener la intención de pedir claridad en nuestro propósito y camino a seguir. Todo aquello que sintamos que está deteriorado o roto y no sabemos el modo de repararlo podría estar pidiendo un cierre en gratitud.

El cielo está muy movido por ello dediquemos nuestra energía a expandir nuestra conciencia, a diseñar una nueva vida con patrones novedosos, dediquemos nuestra energía a imaginar un nuevo mundo para todos en unidad.

Sembremos semillas de unidad humanitaria, de felicidad sin apegos, de progreso universal. Integrando todo lo que es. Integrar todo lo que es genera abundancia.