Recordando el concepto de que la luna llena o plenilunio se da cuando la luna en su recorrido se coloca frente a l Sol por lo que ambos están en signos opuestos complementarios, esta vez se da el plenilunio de Virgo en el grado 21 de este eje.
El 21 en el tarot es la figura de "El Mundo", este arcano nos muestra la totalidad, la completud en armonía y en concordancia con un orden cósmico y terrenal, es un arcano que cuando aparece nos describe el desarrollo de proyectos, el crecimiento en armonía y en cierto grado la perfección dentro de una lógica esotérica y divina.
Cuando se da esta luna llena, Mercurio y Venus se están retirando del signo de Virgo y pasando al vecino signo de Aire: Libra. En su paso por el signo de la meticulosidad y la crítica han dejado una estela de juicios acerca de la imperfección y un castillo de auto-crítica, hemos pensado en todo lo que estaba fuera de lugar y hemos descubierto demasiados defectos, muchos más de los que cualquiera quisiera que se descubran. Así es lidiar con la polarización negativa de este signo de Tierra, pero antes de que se retire este exceso de energía virginiana podemos intentar limpiar y ordenar. Ya una vez apreciado el "espanto del error" que vivimos, pues bien, ahora tomemos esa energía para liberar espacio mental y físico y quedarnos con lo bueno.
En esta luna llena la luz solar ilumina los rincones desordenados, abre esos cajones donde la resistencia del caos persiste y nos invita a depurar.
La energía de Piscis nos lleva a ensoñar y visualizar la forma en la que desarrollaremos nuestros dones, y es probable que nos remita a nuestros sueños de luna nueva allí por el mes de marzo.
Esta luna llena se da en conjunción a Neptuno (co-regente de Piscis) y a Lilith: esto es un montón de energía de introversión así como una fuerte afluencia de mensajes que lleguen desde espacios a los que no estamos acostumbrados tales como nuestro Ser Superior, el Más Allá o simplemente nuestra sombra. Se trata de un movimiento que desnuda nuestra alma y nos despoja de los elementos terrenales que nos proveen de una identidad práctica.
Esta introversión a las que nos arrastra esta energía puede hacer que tomemos contacto con algo que no tiene nombre pero que en definitiva es lo más verdadero que tenemos, es eso que somos en el silencio de la meditación. Desde allí podremos asumir nuestros sueños verdaderos del alma, nuestra misión que es lo que nos mantiene vivos, la razón de ser de todo lo que es en nosotros.
La oposición a Marte puede resultar en dos variables potenciales, tal como sucede con todos los movimientos astrológicos, podemos enfrentarnos a todo y a todos con la cólera propia de un bebe a quién su madre le niega el calor y el alimento, pegarnos al personaje ansioso e irritable o bien podemos tomar esta energía marciana para dar algunos pasos en función de nuestras percepciones de lo divino. Tomar el concepto " que sea tu voluntad " es algo posible con este movimiento energético, es que cuando ese sentir es real, nuestro impulso motor es sutil pero poderoso.
Podemos ser el movimiento que requiera la Divinidad para encarnar sincronías que atiendan los juegos de los dioses.
Soltar la identificación personal con el drama, el deseo y el sufrimiento es uno de los recursos que tenemos a disposición para sobrellevar la poderosa energía emocional que trae esta luna llena, de lo contrario podemos caer en auto-engaños o lo que es peor ser engañados.
Hay que andar sabiendo que todo cambia muy rápido en este momento, lo que hoy adquiere una forma, tendrá mañana otra y por ello tener un ancla en el mundo espiritual nos ayudará a llevar mejor nuestro sendero vital en medio de la crisis planetaria que se perfila con la conjunción Saturno-Plutón que se dará exacta hacia fin de año.
El 21 en el tarot es la figura de "El Mundo", este arcano nos muestra la totalidad, la completud en armonía y en concordancia con un orden cósmico y terrenal, es un arcano que cuando aparece nos describe el desarrollo de proyectos, el crecimiento en armonía y en cierto grado la perfección dentro de una lógica esotérica y divina.
Cuando se da esta luna llena, Mercurio y Venus se están retirando del signo de Virgo y pasando al vecino signo de Aire: Libra. En su paso por el signo de la meticulosidad y la crítica han dejado una estela de juicios acerca de la imperfección y un castillo de auto-crítica, hemos pensado en todo lo que estaba fuera de lugar y hemos descubierto demasiados defectos, muchos más de los que cualquiera quisiera que se descubran. Así es lidiar con la polarización negativa de este signo de Tierra, pero antes de que se retire este exceso de energía virginiana podemos intentar limpiar y ordenar. Ya una vez apreciado el "espanto del error" que vivimos, pues bien, ahora tomemos esa energía para liberar espacio mental y físico y quedarnos con lo bueno.
En esta luna llena la luz solar ilumina los rincones desordenados, abre esos cajones donde la resistencia del caos persiste y nos invita a depurar.
La energía de Piscis nos lleva a ensoñar y visualizar la forma en la que desarrollaremos nuestros dones, y es probable que nos remita a nuestros sueños de luna nueva allí por el mes de marzo.
Esta luna llena se da en conjunción a Neptuno (co-regente de Piscis) y a Lilith: esto es un montón de energía de introversión así como una fuerte afluencia de mensajes que lleguen desde espacios a los que no estamos acostumbrados tales como nuestro Ser Superior, el Más Allá o simplemente nuestra sombra. Se trata de un movimiento que desnuda nuestra alma y nos despoja de los elementos terrenales que nos proveen de una identidad práctica.
Esta introversión a las que nos arrastra esta energía puede hacer que tomemos contacto con algo que no tiene nombre pero que en definitiva es lo más verdadero que tenemos, es eso que somos en el silencio de la meditación. Desde allí podremos asumir nuestros sueños verdaderos del alma, nuestra misión que es lo que nos mantiene vivos, la razón de ser de todo lo que es en nosotros.
La oposición a Marte puede resultar en dos variables potenciales, tal como sucede con todos los movimientos astrológicos, podemos enfrentarnos a todo y a todos con la cólera propia de un bebe a quién su madre le niega el calor y el alimento, pegarnos al personaje ansioso e irritable o bien podemos tomar esta energía marciana para dar algunos pasos en función de nuestras percepciones de lo divino. Tomar el concepto " que sea tu voluntad " es algo posible con este movimiento energético, es que cuando ese sentir es real, nuestro impulso motor es sutil pero poderoso.
Podemos ser el movimiento que requiera la Divinidad para encarnar sincronías que atiendan los juegos de los dioses.
Soltar la identificación personal con el drama, el deseo y el sufrimiento es uno de los recursos que tenemos a disposición para sobrellevar la poderosa energía emocional que trae esta luna llena, de lo contrario podemos caer en auto-engaños o lo que es peor ser engañados.
Hay que andar sabiendo que todo cambia muy rápido en este momento, lo que hoy adquiere una forma, tendrá mañana otra y por ello tener un ancla en el mundo espiritual nos ayudará a llevar mejor nuestro sendero vital en medio de la crisis planetaria que se perfila con la conjunción Saturno-Plutón que se dará exacta hacia fin de año.
Piscis encarna la verdad de la luz divina viviendo en un corazón humano
Abraza a tu humano
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