La luna nueva de Sagitario se dará en el grado 4.. Han pasado apenas algunas horas desde la bella unión que se aprecia a simple vista en el cielo entre los dos afortunados, Venus y Júpiter. Este encuentro en el Centro Galáctico nos permitió soñar e ilusionarnos con el ideal del alma que palpita dentro de nuestro corazón. Y nos da alivio saber que hay esperanzas entre tantas convulsiones y conflictos de resurgimiento.
Marte desde Escorpio se opone a Urano. Esta oposición trae un tinte de enojo, molestia y cambio rotundo. La agresividad y la violencia van dando unos toques de energía convulsa para llegar al escenario de la conjunción más famosa de los últimos tiempos: Saturno y Plutón en Capricornio.
El regente de este novilunio es Júpiter, que se encuentra a punto de cambiar de signo, para este evento estará en el grado 28 de Sagitario, signo en el que se domicilia y desde allí nos dará su energía esperanzadora para enfrentar las tormentas que cada uno de nosotros vivimos actualmente en mayor o menor medida.
El planeta de la buena fortuna, la expansión de la conciencia y la justicia será embebido con la energía del Centro Galáctico donde la flecha del arquero apunta mostrándonos que hay algo más allá de la materialidad humana, que somos polvo de estrellas en acción y merecemos que nuestros sueños se expandan con el fin de la evolución de nuestra conciencia.
Podemos nutrirnos en esta lunación solicitando al Universo creador se nos otorgue una mayor visión de nuestra razón de ser.
Venus ya se encarama sobre Capricornio, un lugar de seriedad y elegancia, de compromiso con el propio deseo y desde allí se colocará pronto en cuadratura a Quirón en Aries: este aspecto entre ambos nos recordará las heridas en nuestro amor propio, el dolor que nos ha infligido la falta de respeto a nuestra dignidad personal y a nuestro ser más auténtico.
El novilunio se da en el grado cuatro y lo mismo será el próximo novilunio en Capricornio. El cuatro nos recuerda la importancia de la estabilidad, la base y el equilibrio dentro del mundo material. El orden y la solidez sobre la que se edifica el mundo de las formas. Recordemos las cuatro estaciones, los cuatro elementos, cuatro puntos cardinales.
La próxima luna nueva en Capricornio es el próximo 25 de diciembre y será protagonista de un eclipse y una serie de encuentros energéticos en esta zona del Zodíaco que darán lugar a una puerta energética muy movilizante para toda la Humanidad.
Puedes compartir este texto con amor, citando fuente y autor. También puedes dejar tus comentarios si lo deseas. Gracias.
María Valeria Correia Nobre
Marte desde Escorpio se opone a Urano. Esta oposición trae un tinte de enojo, molestia y cambio rotundo. La agresividad y la violencia van dando unos toques de energía convulsa para llegar al escenario de la conjunción más famosa de los últimos tiempos: Saturno y Plutón en Capricornio.
El regente de este novilunio es Júpiter, que se encuentra a punto de cambiar de signo, para este evento estará en el grado 28 de Sagitario, signo en el que se domicilia y desde allí nos dará su energía esperanzadora para enfrentar las tormentas que cada uno de nosotros vivimos actualmente en mayor o menor medida.
El planeta de la buena fortuna, la expansión de la conciencia y la justicia será embebido con la energía del Centro Galáctico donde la flecha del arquero apunta mostrándonos que hay algo más allá de la materialidad humana, que somos polvo de estrellas en acción y merecemos que nuestros sueños se expandan con el fin de la evolución de nuestra conciencia.
Podemos nutrirnos en esta lunación solicitando al Universo creador se nos otorgue una mayor visión de nuestra razón de ser.
Venus ya se encarama sobre Capricornio, un lugar de seriedad y elegancia, de compromiso con el propio deseo y desde allí se colocará pronto en cuadratura a Quirón en Aries: este aspecto entre ambos nos recordará las heridas en nuestro amor propio, el dolor que nos ha infligido la falta de respeto a nuestra dignidad personal y a nuestro ser más auténtico.
El novilunio se da en el grado cuatro y lo mismo será el próximo novilunio en Capricornio. El cuatro nos recuerda la importancia de la estabilidad, la base y el equilibrio dentro del mundo material. El orden y la solidez sobre la que se edifica el mundo de las formas. Recordemos las cuatro estaciones, los cuatro elementos, cuatro puntos cardinales.
Siembra tus semillas de expansión, de búsqueda de conocimiento, de fe y esperanza, de viajes y alegría, de comprensión para que la llegada de nuevas fuerzas cósmicas nos encuentre en equilibrio y calma.
La próxima luna nueva en Capricornio es el próximo 25 de diciembre y será protagonista de un eclipse y una serie de encuentros energéticos en esta zona del Zodíaco que darán lugar a una puerta energética muy movilizante para toda la Humanidad.
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María Valeria Correia Nobre