La luna llena correspondiente al tiempo en el que el Sol recorre el signo de tierra Tauro es muy importante en nuestro calendario y se dará en el grado 17 del eje Tauro-Escorpio. Esta luna llena corresponde al festejo budista de Wesak. Pero también se corresponde con la fiesta celta de Beltaine o Buenfuego, que se daba en honor del dios del fuego iniciada alrededor del 1 de mayo. Esta fiesta indicaba la mitad del año y la llegada pronta de la temporada de verano, se trata pues de una energía similar a la de Wesak. Las flores, la fertilidad y el poder dador de vida del fuego y del amor. Actualmente esta tradición está volviendo para aquellos influenciados por la cultura celta.
Se inicia entonces la fiesta de la luz. Las hogueras en las montañas indicaban a los pobladores lejanos el inicio del tiempo de la luz. No solo se encendían hogueras sino que se disfrutaban de todos los placeres sensoriales posibles. Las flores, los banquetes, los sahumos, las canciones, el sexo, las bodas eran la manera de honrar la vida para aquellos antiguos europeos.
La energía de Tauro nos trae el registro corporal del gozo de estar encarnados. Corresponde con el chakra laríngeo que se vincula con la expresión de nuestra verdad y la creatividad que no es más que la correspondencia con el reflejo de nuestra divinidad creadora.
Nuestra experiencia en la tierra no sería tal sin un cuerpo como vehículo y ese cuerpo requiere del reconocimiento de la carne para sentir el latido vital renovarse a cada inspiración. La vida es tal por la simple existencia de la muerte reflejada en la simplificada idea del signo de Escorpio en nuestro calendario astrológico.
Los últimos tiempos hemos vivido confusas e impensadas situaciones que nos han implantado diversos temores y a la vez nos han llevado de vuelta al cuerpo. El sueño, la alimentación, el contacto físico y emocional con otros y los trastornos inducidos por los cambios en las rutinas de casi todos los seres humanos ha sido motivo de conversaciones y reflexiones.El miedo a la pérdida de la integridad está más o menos presente en todas las conciencias. Ya hemos sido sacudidos como árboles en medio de una tormenta.
Exploremos nuestras emociones más placenteras y gozosas, unamos nuestro corazón divino al cielo, velemos por la construcción de nuestro pequeño gran mundo soñado sin dejarnos vencer por la interferencia inevitable de las sombras, que encaprichadas en vencedoras sueltan su veneno a tontas y a locas quedando aun más en evidencia su debilidad.
Meditemos con la vista puesta en el fuego de la vida.
Protejamos nuestro campo energético con el poder más grandioso que existe que es el amor.
Que disfrutes de esta luna llena de Wesak y Beltaine
Si lo deseas puedes comentar más abajo. Si quieres puedes compartir el texto mencionado autora y fuente,
Valeria Correia Nobre
Se inicia entonces la fiesta de la luz. Las hogueras en las montañas indicaban a los pobladores lejanos el inicio del tiempo de la luz. No solo se encendían hogueras sino que se disfrutaban de todos los placeres sensoriales posibles. Las flores, los banquetes, los sahumos, las canciones, el sexo, las bodas eran la manera de honrar la vida para aquellos antiguos europeos.
La energía de Tauro nos trae el registro corporal del gozo de estar encarnados. Corresponde con el chakra laríngeo que se vincula con la expresión de nuestra verdad y la creatividad que no es más que la correspondencia con el reflejo de nuestra divinidad creadora.
Nuestra experiencia en la tierra no sería tal sin un cuerpo como vehículo y ese cuerpo requiere del reconocimiento de la carne para sentir el latido vital renovarse a cada inspiración. La vida es tal por la simple existencia de la muerte reflejada en la simplificada idea del signo de Escorpio en nuestro calendario astrológico.
¡Canta primero, hermana de hermano!
Arrastra tu canción, dobla tu canción!
Estabas acostumbrado a hacerlo
Cuando vivías con tus hermanos
Solía ascender
una colina
Solía descender en un valle
Un pájaro blanco se posa en un cerezo en flor en la colina
Un río rápido fluye en el valle
Asciendo la colina
para adornarme
Desciendo en el valle para lavarme
¡Canta primero,
hermana de hermano!
Exploremos nuestras emociones más placenteras y gozosas, unamos nuestro corazón divino al cielo, velemos por la construcción de nuestro pequeño gran mundo soñado sin dejarnos vencer por la interferencia inevitable de las sombras, que encaprichadas en vencedoras sueltan su veneno a tontas y a locas quedando aun más en evidencia su debilidad.
Meditemos con la vista puesta en el fuego de la vida.
Protejamos nuestro campo energético con el poder más grandioso que existe que es el amor.
MEDITA-CANTA-AMA-DANZA
Que disfrutes de esta luna llena de Wesak y Beltaine
Si lo deseas puedes comentar más abajo. Si quieres puedes compartir el texto mencionado autora y fuente,
Valeria Correia Nobre