Son tantas las ideas y pensamientos que bullen en el entramado invisible de la humanidad que es urgente apelar al silencio
Este eclipse de Luna se da en el eje Sagitario-Géminis. El Sol estará en el grado 8 de Sagitario formando una oposición con la Luna en Géminis.
La naturaleza de este eje es cambiante y dinámica, se trata de una vibración que nos contacta con la información y el conocimiento, los viajes, el diálogo, la mente y su aplicación en los aspectos superiores y mundanos.
Este eclipse y su compañero del 14 de diciembre viene a terminar de cerrar el año 2020 para prepararnos para lo que llega en el próximo Solsticio de diciembre, cuando Júpiter y Saturno se unan en el grado cero de Acuario e impulsen un nuevo ciclo gobernado por el elemento Aire.
El 2020 ha dejado a muchas personas al borde del abismo en algún sentido. Cada quién puede haberlo vivido con mayor o menor intensidad. La fuerza arrolladora de la triple conjunción en Capricornio desestabilizó la seguridad que teníamos en distintas áreas de la vida: economías, afectos, seguridad laboral, salud, pérdidas de todo tipo han minado a nuestros seres queridos o incluso a nosotros mismos.
Los eclipses lunares mueven energía emocional y física. En este eclipse quizás se aclare algún asunto que dejará en evidencia la manera en la que el relato construye nuestra realidad. Por un lado el relato que la madre y la familia ha transmitido en la infancia por otro lado el relato social, de nuestro entorno, nuestro pueblo o ciudad, el país y la cultura a la que pertenecemos constituye un sinfín de palabras que tejidas narran una historia que construye una verdad emocional que podríamos modificar con el fin de avanzar más rápido.
El 2020 nos preparó con Urano en Tauro a comprender por medio de las vivencias cotidianas que no hay muchas certezas del mañana sino que todo puede cambiar de un momento a otro.
¿Y que hay del tan mentado "Aquí y Ahora"? Ese concepto que llega de la mano de la difusión del Mindfulness o Conciencia Plena puede ser difícil de practicar pero se torna necesario en medio de la conmoción.
Quizás podamos aprovechar la energía de este eclipse para dejar atrás esas narrativas que nos detienen en la evolución y el crecimiento y comenzar a confiar.
Este eclipse lunar viene a cerrar las puertas de la luna nueva de Géminis del 22 de mayo pasado. Si puedes recordar el punto en el que estabas en esos días te será muy útil para entender el punto en el que estás ahora.
Existen un montón de ideas en nosotros y en lo otros acerca de la realidad, la historia, el estilo de vida, los sentimientos, las actividades, patrones de comportamiento, los cuidados personales, y un interminable etcétera que bombardea la mente individual y colectiva. Muchas mentiras se filtran en este caos de conceptos e información. Mentiras propias y ajenas, voluntaria e involuntarias. Certezas que pueden conducir a mayor confusión.
Lo único cierto puede ser permanecer en el "aquí y ahora". Lo demás es más miedo y necesidad de control que otra cosa. Esto es un tramo más de un camino que puede ser más escarpado, pero no hay vuelta atrás. Formamos parte de un colectivo que vino a este planeta a vivir su evolución con una aceleración nunca antes vista. la información, el tiempo, la mente despliegan un desarrollo notable en comparación con la historia de la humanidad que se encuentra documentada. Nuestros ancestros vivieron guerras, pestes, calamidades pero no vivieron inmersos en tal estímulo cognitivo Es claro que lo que sucede con tantos datos, noticias y demás puede ser traumático en especial para los más mayores, El Nodo Norte en Géminis despliega esta energía para que aprendamos a afinar la percepción y ser responsables de nuestras palabras y pensamientos.
Quizás para enfrentar este eclipse tengamos que intentar limpiar las programaciones mentales que traemos desde nuestra gestación y crecimiento evitando por todos los medios los sentimientos desgarradores que son parte de un drama antiguo.
La Luna Llena de Sagitario en la astrología antakarana toca el punto 55 ( en Géminis) que nos expresa el esfuerzo que debemos desplegar para lograr que nuestras voces internas puedan expresarse de manera que por medio del sonido reverberemos el Plan Mayor. El Sol desde Sagitario toca el punto 61, que invita al silencio para forjar el sonido para manifestar sus sueños y dirigir su energía en consonancia con el Plan Mayor.
El Om para el las religiones brahamanicas es la sílaba divina. Centrarse en el silencio interior puede ser la única opción cuando el ruido nos impide avanzar.
Te deseo una buena temporada de eclipses, con crecimiento y avances rápidos y positivos al ciclo nuevo que se irá forjando a partir de los próximos días.
Si deseas compartir este texto será un placer, no dejes de mencionar fuente y autora. Gracias por leer y estar allí.
Abrazo
Valeria Correia Nobre